Hablamos de tópico cuando comentamos el crecimiento exponencial de Internet y los cambios que estamos viviendo en este entorno. La evolución de los marketplaces es un hecho, y cada vez se adecuan más a las necesidades de las marcas, principalmente en redes punteras como Twitter, Facebook y en toda la blogosfera.

Muchas de las marcas y negocios físicos se encuentran encasillados a la hora de dar el salto a la red y sobre todo darse a conocer. La caída generalizada de ventas que vienen arrastrando en los últimos años, hace de los marketplaces una inversión enfocada a resultados, y lógicamente Internet requiere de una inversión mucho menor que los medios convencionales.

La definición tradicional de un marketplace es clara: plataformas que hacen de nexo entre empresas compradoras (anunciantes) y empresas o particulares vendedores de productos o servicios.

Esta necesidad por parte de las marcas ha reavivado el mercado haciendo que muchas plataformas emerjan ofreciendo exactamente lo que el cliente solicita: un nexo en el 2.0 que les acerque al público objetivo para dar a conocer las ventajas de su producto.

Estas plataformas ofrecen competitividad en cuanto a posibilidades, herramientas, usabilidad y elementos diferenciadores, que permiten a las marcas decantarse por la más efectiva y rentable.

Si algo tienen en común el off y el on es que no puedes quedarte dormido ni un sólo segundo, siendo obligatorio reinventarse continuamente para evitar ser superado por la competencia. Ese paso por delante es el que se tiene en cuenta a la hora de la selección definitiva y el que define el crecimiento de las distintas plataformas.

Los marketplaces de marketing social son plataformas que ponen en contacto a anunciantes (marcas) y dinamizadores (usuarios de Twitter y Facebook) con el objetivo de generar conversaciones en social media alrededor de marcas, productos y/o servicios.

La comunicación bidireccional y la planificación mediante el llamado “efecto lupa”, permite la posibilidad de hacer la presión concreta en los momentos adecuados. Mientras, el auditing de contenidos garantiza el control total del mensaje que va a ser comunicado, y la originalidad de cada una de las publicaciones dota de naturalidad a la acción, aumentando así la reputación de la marca. Estos 3 elementos marcan la diferencia entre una marca y su competencia y entre unos marketplaces y otros.

En HMG, tenemos muestras de este continuo cambio: Twync.es es la plataforma que utilizamos para poner en contacto marcas con usuarios de RRSS. Recientemente hemos lanzado la nueva versión con funcionalidades que mejorarán la experiencia comercial tanto de anunciantes como de los dinamizadores.

Respecto a marketplaces y blogging, Zync.es es otra de las plataformas con las que trabajamos y para la que planeamos una versión actualizada antes de finalizar 2014.

Alberto Benedicto, Account Manager de HMG